Destrucción o Civilización?
¿Quién no se siente bendecido por los dioses? Al pasearse por una hermosa playa, o bañarse en el vaivén de sus cristalina y limpias aguas.
Nuestro espíritu se eleva al visitar extensos y profundos bosques. Nos sentimos libres al recorrer las campiñas de verdes prados, rodeados de valles y flores de hermosos colores que impregnan de rico olores, las aurora del amanecer. . Quien no se emociona al escuchar el trinar de los pájaros que anuncia la llegada de un nuevo día.
¡Observar el horizonte y querer traspasar sus líneas paralelas! Tener la capacidad de disfrutar y admirar lo grandioso de la naturaleza. Es un don divino que pocas personas tienen la capacidad de experimentar.
La naturaleza es un refrigerio para el alma y eleva al espíritu a otro nivel de contemplación. Un calmante para nuestro estresante estilo de vida, fruto de nuestra apabullante civilización.
Pero el papel de la naturaleza no es relajar nuestro sentido. Sino procrear y sostener la vida.
La naturaleza la forman: aire, tierra, agua, plantas y animales. Todos ellos forman una cadena que si se rompe afecta a los demás ecosistema. Y esto es exactamente lo que está pasando, por la presión y la sobre explotación que ejerce el hombre sobre estos recursos.
Los recursos naturales los utiliza el hombre como materia prima de sus inventos, sostén de su selva de cemento y de su decadente y degradada civilización”.
No tenemos que ser Nostradamus, ni científico, ni adivinador para saber los que nos deparará el futuro. y ni todos los términos que utilizan la humanidad para medir la magnitud de un desastre o una tragedia, podrás describir el espantoso futuro-inmediato que nos espera.
Aunque el hombre usa algunos términos para referirse a tragedia humanas (antisemitismo, racismo, religiones) el hombre causa un verdadero holocausto natural (aniquilación) sistemáticamente de todas las especies y recursos naturales que les dan forma y vida al *Planeta Tierra*.
¿CIVILIZACIÓN O ANIQUILACIÓN?
Considerándose el hombre el ser supremo de la creación, por sus descubrimientos, e inventos. Sus grandiosas hazañas terrestre y extraterrestre lo han llevado a un nivel insuperable de poder ante cualquier Dios, especie o cosa. Ya que se siente encima del bien y del. A tal punto que se ha atreve a tomar la vida de los demás decidiendo quien vive y quien muere.
La arrogancia de esta especie (hombre) no les permite ver el desastre que se nos avecina. Prefiere hacer como el mito del avestruz, esconde su cabeza en la arena para no ver el apocalipsis ecológico que su fatídica civilización va dejando a su paso.
El hombre todavía no entiende, que sus jueguitos tecnológicos (que los han hipnotizados) sus inventos y su selva de cementos (los verdaderos dinosaurios del siglo (XXI) y su desastre ecológico llamado civilización, no pueden sustituir los recursos naturales. Ya que sus inventos no sostienen la vida y las estériles selvas de cemento no producen alimentos.
Pero increíblemente la vida está siendo arrasada de la faz de la tierra y sustituida por aquellas cosas que no tienen sentido para la vida.
El hombre es la maquinaria más mortífera y destructiva de la creación. Y tiene la capacidad de hacernos volar a todos juntos y al Planeta Tierra en pedacitos.
Desde que el hombre apareció en la faz de la tierra comenzó el principio del fin para la vida. Desde entonces todos podemos seguir su siniestro rastro de su macabra civilización.
El planeta tierra sufre la implacable maquinaria destructiva del hombre. Y Hoy en día hablamos de: agujero en la capa de ozono, contaminación del aire, deforestación de los bosques a gran escala, desecación del suelo, extinción de las especie, destrucción de los ríos, manglares y humedales, escasez de agua potable, lluvias ácida, contaminación de los mares, océanos, lagos y aguas acuíferas, reducción de los glaciares, escasez de alimentos (aunque se desechan en el mundo toneladas de alimentos) hambruna extremas, ( ver hambruna en el cuerno de áfrica) explosión demográficas, enfermedades, guerras y muertes.
Sin hablar de los desechos químicos y sólidos que son un verdadero rompecabezas. Pues su recolección en las mayorías de los países no hay un sistema viable ni cómo deshacerse de ellos. En su mayoría van a parar a los (ríos, playas, océanos, valles, llanuras y montañas) sin dejar de mencionar la basura radioactiva, que es motivo de gran preocupación por la peligrosidad que esta representa. Y que muchas veces usan los países en vías de desarrollo para deshacerse de ellas. De hecho, los desechos de la civilización han convertido al planeta tierra en un verdadero tiradero global.
Sin contar la tirantez y las tensiones que viven las naciones hoy en día, causados por los problemas medio ambientales.
Las generaciones futuras y algunas presentes no tienen, ni tendrán la oportunidad de conocer, ni disfrutar muchos lugares espectaculares, encantadores, de ensueños, mágicos y de belleza inigualable. Ni otras criaturas que un día habitaron nuestro planeta, y desaparecieron para siempre de la faz de la tierra. Para darles paso a las sombrías y estériles Selvas de Cemento.
Quizás plantas y animales quedaran plasmado en un cuadro o guardado en algún libro de una solitaria biblioteca, o en un sombrío y frío museo, o algún filme robotizado de Hollywood. Quizás los recordaran atreves de historietas, cuentos, narraciones, fábulas. O convertidos en un mito o una leyenda.
Tal vez, revivirán en los recuerdos de algún anciano o anciana de aquellas imágenes de estos idílicos lugares del planeta tierra donde un día la vida floreció y cautivo nuestra imaginación.
¡Ahora! ya todos sabemos que la destrucción del planeta tierra, tiene un nombre! “CIVILIZACIÓN”.
¿Puede haber desarrollo a base de la destrucción de los recursos naturales?
¿Oh que nombre les damos que yo no sé?